jueves, 17 de febrero de 2011

Acerca de Zeitgeist y otros refritos.


Hace menos de 15 días tuve la oportunidad de ver la tercera entrega de Zeitgeist, la cual tengo entendido fue estrenada hace no más de 2 meses, debo confesar que he visto completa la hasta ahora trilogía de la saga de documentales que presumen ser creados de manera responsable e informativa, haciendo entrevistas a individuos eruditos en los temas que se tratan, los cuales desconozco.
En esta ocasión el tema que se abarca es la crisis del modelo capitalista como fruto de las contradicciones del mismo, haciendo énfasis en la comercialización del dinero como mercancía y no como bien de uso, en otras palabras: poner precio al dinero a través de la venta del mismo mediante los intereses que se generan al solicitar un crédito. Por ejemplo: Si yo necesito $100 y no los tengo, recurro al banco a pedirlos, el banco que ve el dinero como una mercancía decide "prestarme" a un plazo establecido un billete de $100 con un interés de $10 una vez que el plazo venza. Cuando el plazo vence, yo estaré pagando al banco $110  por un billete de $100 o bien, el banco me habrá vendido un billete de $100 a un precio de $110.
Hasta aquí no existe nada de extraordinario, y cualquier estudiante de tercer semestre de Economía sabría que es cierto lo antes mencionado.
Más adelante, Zeitgeist 3 menciona que una vez que las bolsas se colapsen como ha venido ocurriendo, la gente se dará cuenta que el dinero es un ser malvado que ha pervertido y destruido a la sociedad en su conjunto, por lo cual todo mundo decidirá regresar tan despreciable objeto a sus dueños: los bancos centrales, acabando así con el modelo Capitalista.
Es importante señalar que es en este preciso momento cuando Zeitgiest pierde la cabeza y parece llevarme a mis lecturas de Economía Política sobre marxismo, leninismo y uno que otro folleto de la extinta URSS, donde los autores establecían la caída del sistema por la lucha de clases y la concientización de la clase proletaria, ese momento pleno y utópico donde el obrero marginado e inculto abría los ojos y mágicamente comenzaba la nueva era de la creación comunista, donde todo mundo se volvía cordial con sus semejantes pero sobre todo: racional.
No es que sea fatalista, ni pesimista, pero realmente la historia nos muestra que los cambios en modos de producción, no se dan ni de forma radical y mucho menos planeada, siempre ha existido una transición, la cual, en Zeitgeist no se muestra clara. Por lo menos Marx señalaba que ésta, ocurriría mediante la intervención del Estado, el cual se encargaría de administrar el cambio a través de lo que llamó Socialismo; mientras que la propuesta planteada en Zeitgeit, ocurría de manera racional cuando los seres humanos decidieran crear ciudades autosuficientes con desarrollo sustentable en la cual al principio existirían voluntarios que se encargaran de programar las máquinas que generan máquinas.
En lo personal considero Zeitgeist una película amarillista, poco seria, que busca vender una idea poco sustentada mediante ideas recicladas, las cuales proyecta como propias, incluso recurre a la analogía de cuando te invitan a ingresar a un trabajo con estructura piramidal, en el que lo primero que te dicen es: ¡Esto no es una pirámide!, igual aquí se informa al espectador que esto no es: Marxismo y mucho menos Utopismo. Sin embargo me atrevo a mencionar que el proyecto Zeitgeist es poco viable al dejar abiertas preguntas como: ¿en que se empleará la gente si todo será creado por máquinas que crean máquinas? ¿Acaso todas las ciudades serán creadas de igual manera, cuando el clima y el terreno son diferentes en todo el globo terráqueo? ¿Qué ocurrirá con el gobierno? ¿Cómo se llevará a cabo el medio de intercambio si ya no existe el dinero? ¿Si se decidiera regresar al trueque, bajo qué tabla de valor sabría el valor del trabajo de un carnicero vs. el de un programador de software?
Sin embargo, las preguntas más importantes no son de carácter económico, sino filosófico: ¿Cómo hacer que el ser humano acepte perder su individualidad y considerarse simplemente un engrane más en la gran máquina? ¿Cómo evitar que exista quien actúe de manera desleal buscando algún beneficio propio? ¿Cómo evitar la mediocridad laboral, intelectual y personal de un individuo que aparentemente no tiene carencias materiales?